Criterios de búsqueda de materiales educativos
La Norma 71362 de “Calidad de los materiales educativos digitales (MED)” elaborada por la Asociación Española de Normalización (UNE) proporciona un modelo de base para definir y evaluar, cuantitativa y cualitativamente, la calidad de los materiales educativos digitales. Sus objetivos son:
- Guiar la creación de un recurso educativo digital de calidad.
- Valorar estos recursos de forma precisa y objetiva.
- Facilitar a los usuarios la elección del mejor MED.
Además establece cuatro tipos de usuarios con diferente aplicación de la norma:
- Autor/Creador: engloba a profesores, estudiantes, editores y equipos de creación de MED.
- Consumidor/Usuario: para ayudar a seleccionar los mejores materiales educativos digitales para sus necesidades.
- Revisor/Evaluador: permitiendo valorar la calidad de los materiales educativos digitales.
- Proveedor/Distribuidor: la norma permite certificar la calidad de sus productos.
INTEF. Recursos Educativo Digitales ¿Cómo valorarlos? Norma UNE 71362
Del mismo modo, tendremos que tener en cuenta la expresión ‘content curation’, traducida como curación de contenidos, la cual hace referencia al proceso de filtrar información y agregarla en nuevos contenidos, más complejos y de más valor para la comunidad a la que se dirigen.
Esta tarea requiere, no solamente disponer de las habilidades y recursos para filtrar la mejor información, sino que también implica un proceso de elaboración de unidades de información más complejas a partir de elementos más simples, y por tanto es un proceso que genera nuevo conocimiento en quien desarrolla esta actividad.
La fases para realizar una curación de contenidos son las siguientes:
- Búsqueda de contenido.
- Filtrado y selección de información relevante.
- Elaboración y adaptación del contenido al contexto del alumnado.
- Análisis y depuración del contenido.
- Distribución de la información.
Conectatic: Curación de contenidos (CC-BY-SA)
Y por su puesto, tendremos que tener en cuenta la infoxicación, término acuñado por primera vez en 1996 por Alfons Cornella para definir la situación de exceso información, de intoxicación informacional, en la que uno recibe más información de la que es capaz de procesar. Actualmente es un término que se asocia al mundo digital y crea inconvenientes como el tiempo que necesitamos para filtrar toda la información recibida o la inseguridad o ansiedad que nos puede producir el no poder mantener el ritmo de actualización de la información.
Como consecuencia surge la necesidad de aprender a gestionar este exceso de información: curar contenido y aprender a ser un content curator.