Situaciones de aprendizaje, ¿qué son?
Concepto de situación de aprendizaje
El desarrollo legislativo, tanto nacional como autonómico, de la Ley Orgánica 3/2020, de 29 de diciembre, (LOMLOE) por la que se modifica la Ley Orgánica 2/2006, de 3 de mayo, de Educación, introduce la situación de aprendizaje como el principal instrumento de aplicación del currículo.
Por ejemplo, la Orden ECD/1172/2022, de 2 de agosto del currículo aragonés, define las situaciones de aprendizaje de la siguiente forma:
Situaciones y actividades que implican el despliegue por parte del alumnado de actuaciones que contribuyen al desarrollo de las competencias clave y las competencias específicas y cuyo diseño involucra el aprendizaje de diferentes saberes básicos asociados a una o varias materias.
De acuerdo con la propia normativa, una situación de aprendizaje presenta las siguientes características:
- Integra los elementos curriculares de una o varias materias: saberes básicos, criterios de evaluación y competencias.
- Tiene unos objetivos claros y precisos.
- Propone tareas complejas que permiten al alumnado aplicar lo aprendido y construir nuevos aprendizajes.
- Fomenta la autonomía personal, el pensamiento crítico y la creatividad.
- Está referidas a un contexto real , cercano y de importancia para el alumnado, con especial atención a los retos del siglo XXI, como la sostenibilidad, la convivencia y el interés común.
- Permite tanto el trabajo individual como en grupos, permitiendo al alumnado asumir responsabilidades personales y actuar cooperativamente.
- Implica la producción y la interacción verbal.
- Usa recursos en distintos soportes y formatos, tanto analógicos como digitales.
En realidad, el concepto de situación de aprendizaje no difiere mucho de la práctica pedagógica actual, derivada de los principios metodológicos que estableció la LOGSE en 1990. Por ejemplo, en Tecnología de Educación Secundaria Obligatoria, el currículo LOGSE consideraba como eje de la materia la realización de proyectos tecnológicos en grupo.
Teniendo en cuenta todo lo expuesto, parece claro que las metodologías activas resultan especialmente adecuadas para desarrollar situaciones de aprendizaje. El aprendizaje basado en proyectos, el aprendizaje basado en problemas, el aprendizaje cooperativo, la gamificación o la clase invertida son algunas de las metodologías basadas en el principio learning by doing, o aprender haciendo.
Un aspecto interesante de las situaciones de aprendizaje es que deberían estar formuladas de acuerdo con el diseño universal para el aprendizaje, DUA, que establece la necesidad de planificar las acciones educativas partiendo de la diversidad, con el fin de dar oportunidades para aprender a todo el alumnado. Como consecuencia, una situación de aprendizaje no debería necesitar adaptaciones, sino que debería poder ser aplicada independientemente de las características de cada persona.
En los siguientes enlaces encontraremos los currículos aragoneses LOMLOE para las distintas etapas educativas. En todos los currículos de las distintas áreas y materias se ejemplifican situaciones de aprendizaje.
Elementos de una situación de aprendizaje
La formalización en detalle de las situaciones de aprendizaje corresponde al último nivel de concreción curricular o programación de aula. No es necesario por lo tanto que las programaciones didácticas incluyan los desarrollos de la situaciones de aprendizaje. De hecho, la normativa establece que en una programación didáctica sólo es preceptivo indicar los criterios para la elaboración de las situaciones de aprendizaje.
El artículo 59.3 de la Orden ECD/1172/2022, de 2 de agosto, por el que se aprueba el currículo aragonés para la ESO, establece en su punto i, que las programaciones didácticas deben incluir al menos:
i) Estrategias didácticas y metodológicas: Organización, recursos, agrupamientos, enfoques de enseñanza, criterios para la elaboración de situaciones de aprendizaje y otros elementos que se consideren necesarios.