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Unidad 16. Metodologías adaptadas a las aulas rurales multigrado

Aclaraciones previas

Numerosas publicaciones relacionadas con la escuela rural y sus aulas multigrado sugieren promover un aprendizaje activo, situando al estudiante en el centro del proceso educativo. Para ello, se recomienda el uso de metodologías activas. Sin embargo, como mencionamos anteriormente, es esencial analizar la aplicabilidad de estas en las ARM. Este paso es necesario, en tanto que sus respectivos cuerpos de conocimiento han sido desarrollados en y para aulas graduadas, principalmente. Es complicado encontrar una obla que describa cómo aplicar tal o cual metodología en estas clases.

¿Alguna vez has asistido a una charla o curso de formación y has percibido que algunas de las propuestas descritas eran difícilmente aplicables para un aula multigrado? 

Respecto a esta cuestión, un ejemplo que solemos emplear se centra en el aprendizaje cooperativo. Si analizamos las propuestas convencionales sobre el reparto de roles dentro del grupo o al desarrollo de algunas estructuras cooperativas, quizá lleguemos a pensar que es complicado llevarlo a cabo en un aula en el que hay alumnado de 3 años y de 11, por poner un ejemplo. 

¿Significa esto que no se puede utilizar el aprendizaje cooperativo en un aula rural multigrado? Creemos que sí es posible, pero es probable que debas realizar ciertos ajustes a la propuesta original, para que se adapte a las condiciones de tu aula. 

Dado que no se ajusta a las pautas originales formuladas por determinados autores, ¿deja de ser aprendizaje cooperativo?  Tenemos una percepción que quizá no compartas. Consideramos que lo más interesante no son las etiquetas, ni la aplicación exacta de tal o cual estructura. Lo verdaderamente aprovechable de una metodología es lo que genera en nuestro alumnado a nivel cognitivo, afectivo, psicomotriz… Por lo tanto, debatir si debemos llamarlo aprendizaje cooperativo o utilizar otro término debido a las adaptaciones realizadas, es algo carente de relevancia, desde nuestro punto de vista. 

Somos conscientes de que los términos enfoque/modelo pedagógico, metodología, método, estrategia metodológica, técnica, etc. no son sinónimos. No obstante, para simplificar la cuestión, vamos a emplear el término “metodologías” para englobar todas las propuestas que aparecen a continuación, siendo conscientes de que, estrictamente, algunas no lo son.

PARA SABER MÁS: si quieres profundizar sobre la terminología mencionada y aclarar las dudas que te hemos podido generar, utilizando una categoría incorrecta, puedes leer esta entrada de la web theflippedclassroom.es.

Un tercer punto a aclarar. El número de metodologías activas viene creciendo en los últimos años. Siendo conscientes de eso, presentamos algunas metodologías (y técnicas) que hemos testado en ARM

¿Son las más recomendables para un aula rural multigrado? No. Simplemente, son algunas que conocemos. 

¿Puedo aplicar otras metodologías que no se citan aquí? No solo puedes, sino que si lo haces:

  • Enriqueces nuestra profesión.

  • Amplías el cuerpo de conocimiento sobre la didáctica multigrado (te animamos a compartir tu experiencia a través de los medios que consideréis), y sobre todo

  • estarás construyendo procesos educativos adaptados a las necesidades de tu alumnado.

Finalmente, también queremos aclarar que este apartado no pretende ahondar en cada metodología. En Aularagon existen otros cursos destinados a dicha profundización.  Simplemente, mostrarte ciertos ejemplos.

ABP

¿En qué consiste?

Bajo las siglas ABP se engloban dos enfoques parcialmente diferentes pero relacionados: el Aprendizaje Basado en Problemas y el Aprendizaje Basado en Proyectos. Aunque podríamos proporcionar ejemplos de ambos, nos centraremos en el Aprendizaje Basado en Proyectos.

Dada su popularidad, es probable que ya poseas ciertos conocimientos sobre el ABP, de modo que solo te vamos a proponer materiales de revisión voluntaria.

PARA SABER MÁS. Si deseas conocer algo mejor el ABP te presentamos dos vídeos: presentación animada y presentación con ponentes.

Por otro lado, hemos de reconocer que existen diferentes formas de llevar a cabo el ABP. Asimismo, hay quien lo confunde con trabajar por proyectos, o con los centros de interés de Decroly. Este es un aspecto que, como ya hemos reconocido, no nos parece especialmente relevante. De hecho, en la práctica, nosotros mezclamos estas propuestas, sintiéndonos menos encorsetados.

Aplicabilidad en aulas rurales multigrado

Como habrás percibido durante el curso, existen similitudes entre las recomendaciones para elaborar la programación multigrado y la aplicación del ABP. La forma de delimitar los saberes que componen el proyecto es similar a la construcción del entramado que conforma la programación en red. 

El ABP favorece los dos tipos de construcción del conocimiento que venimos citando a lo largo del curso. Por un lado, permite la construcción autónoma y personal. Cada estudiante puede llevar un ritmo y profundizar según su capacidad. Esto es útil para cualquier tipo de clase, pero especialmente apropiado para un aula rural multigrado. Por otro lado, promueve la construcción colectiva del conocimiento, mediante intercambios y tareas grupales.

Por estas y otras razones, creemos que el ABP es una de las opciones metodológicas más adecuadas para la aplicación práctica de la programación multigrado.

Adaptaciones y ejemplos

Hay varias formas de aplicar el ABP en ARM. Te presentamos algunos ejemplos y variantes. Como ocurrirá con otras metodologías, no disponemos del espacio suficiente para profundizar en cada ejemplo. Simplemente, queremos que te fijes en el planteamiento que lo diferencia de su aplicación en otro tipo de aulas.

  1. Proyecto temático graduado complementario: “Expertos en vertebrados”.

Una de las opciones pasa por plantear proyectos con temática parcialmente diferente a cada itinerario, destinando unas sesiones finales a la puesta en común de los aprendizajes alcanzados. Si no estás habituado/a a trabajar mediante proyectos, quizá sea una buena opción para comenzar.

Este proyecto se centró en una única disciplina, aunque se abordaron varias competencias clave. A partir de los animales favoritos de los distintos miembros de la clase, se exploraron las diferentes familias de vertebrados. 

Cada itinerario (grado) investigó sobre una familia en particular. Los nodos principales y gran parte de los secundarios fueron comunes a todos los itinerarios: alimentación, características del cuerpo: partes, piel, desplazamiento; reproducción; relación con los humanos. La profundidad diferencial marcó las variaciones entre grupos.

Trabajaron colaborativamente dentro del grado, pero no intercambiaron información con otros itinerarios durante el proceso.

Hubo tres grandes tareas para facilitar la distribución de la atención pedagógica directa:

  • Búsqueda de información (indirecta). El docente seleccionó una colección de libros y vídeos que fueron empleados como recursos de autoaprendizaje. El alumnado tuvo libertad para elegir entre estos materiales.
  • Síntesis con el docente (directa). El alumnado fue explicando al docente la información recogida. Este aclaró dudas, amplió algunos aspectos y ayudó a reflexionar sobre algunos datos registrados.
  • Construcción del lapbook (indirecta). Se diseñó el producto como conjunto y según sus partes. Se fue rellenando paulatinamente.

Generaron dos productos individuales: lapbook y exposición oral ante el resto de la clase a partir de este recurso. Finalmente, se destinaron dos sesiones para llevar a cabo diversas tareas comunes a toda la clase, a modo de síntesis. Cada itinerario actuó como experto y guía del resto de estudiantes.

Flipped classroom (edpuzzle)

Gamificación (classdojo, tarjetas, Genially para brakeout multigrado)

Aprendizaje cooperativo (Jigsaw)

Peer instruction