3. La tierra: paralelos y meridianos
La tierra puede ser cortada por cualquier plano que sea paralelo al plano ecuatorial. La intersección de estos planos paralelos con la superficie terrestre recibe el nombre de paralelos.
El ecuador es el paralelo de mayor longitud, a medida que los planos paralelos se acercan a los polos los paralelos resultantes son elipses cada vez más pequeñas.
Para nombrar a los paralelos se usa una medida angular llamada latitud. Esta hace referencia al ángulo del arco que forma el paralelo con el eje ecuatorial.
El ecuador corresponde a un ángulo de 0 grados. A medida que nos desplazamos hacia los polos ese valor aumenta hasta un ángulo máximo de 90 grados. Para diferenciar un polo de otro, a los paralelos del hemisferio norte se les añade una N detrás, y a los del hemisferio sur una S.
Todo punto tiene una latitud, que es el ángulo, N o S, que hace el paralelo que pasa por ese punto con el plano ecuatorial, en valores que van de 0 a 90º.
A cualquier plano que contienen el eje polar y que corta con el planeta tierra se le llama plano meridiano. Son planos perpendiculares al plano ecuatorial. La intersección del plano meridiano con la superficie terrestre genera una elipse llamada meridiano.
Aunque a lo largo de la historia se han tomado varios meridianos como referencia, cada país el suyo, ahora mismo hay un meridiano considerado 0 de manera internacional: el meridiano de Greenwich, que además pasa por Aragón.
Los meridianos se nombran mediante el ángulo que forman con el meridiano cero o de Greenwich. A este ángulo se le llama longitud. Si el meridiano está a la derecha de Greenwich se establece una longitud Este (E), y si está a la izquierda una longitud Oeste (W), hasta un valor máximo, en ambos casos, de 180º (180º al este es igual que 180º al oeste, y es el meridiano que forma elipse con el de Greenwich).
Todo punto tiene una longitud, que es el ángulo, E o W, que hace el meridiano que pasa por ese punto con el meridiano cero o de Greenwich, en valores que van de 0 a 180.