2.1. Diseño pedagógico
Como pasos previos y antes de comenzar a realizar una presentación, hemos de analizar entre otras variables:
La edad del alumnado, el tamaño del grupo, el rol del grupo ante la presentación, el conocimiento previo del grupo sobre la temática de la presentación, el interés de la misma, objetivo y contenido a desarrollar. Sin olvidarnos de las condiciones físicas del espacio y de los recursos materiales existentes.
Una presentación debe ser breve si por ella misma es el núcleo de atención y de ayuda, si es utilizada de forma interactiva puede ser más larga. No sobrecargarla de información,no caer en una mera repetición de los puntos-esquema de la exposición.
Planificar con papel y lápiz las diferentes diapositivas, determinar las ideas importantes, este papel te ayuda en la exposición a darte seguridad.
Lo que es accesorio mostrarlo en forma de hipervínculo, y la exposición oral tiene que ir acompañado por un resumen o frase principal en las diapositivas, colocar elementos con significado pleno que no conlleven la utilización de elementos auxiliares en la misma diapositiva. Proporcionar al final de la presentación documentación complementaria.
Recomendamos utilizar diferentes diseños dentro de la presentación (si es muy larga), aunque dentro de un marco global común; no se debe abusar de listas y viñetas y, sobre todo, de los efectos de animación, que es mejor concretarlos en momentos adecuados; emplear contenidos informativos de apoyo y motivación, no meramente repetitivos.
Nos detenemos un instante a reflexionar sobre cómo ha de ser el diseño de una presentación con fines educativos. Ésta no debe ser una mera exposición de contenidos sobre un tema de interés educativo, ni un listado de recursos para realizar una actividad. Queremos diseñar una presentación que ayude a los alumnos a alcanzar unos objetivos pedagógicos. Esto exige que el diseño pedagógico esté presente a lo largo de todo el proceso de diseño y creación, influyendo en la toma de decisiones tanto sobre el aspecto formal como sobre el aspecto estructural.
Podemos distinguir tres tipos de presentaciones educativas:
- Presentaciones susceptibles de ser utilizadas como recurso educativo, por contener temas diversos cuyo contenido puede ser utilizado en procesos de enseñanza - aprendizaje, pero sin un diseño específicamente educativo. Es el caso de una presentación de la que podemos coger las diferentes imágenes para después utilizarlas como recursos educativos.
- Presentaciones con contenidos educativos. Aunque no están concebidos para apoyar procesos de aprendizaje específico sus contenidos son educativos.
- Presentaciones diseñados para ser utilizados en procesos de enseñanza - aprendizaje. Son aquellos a los que estamos haciendo referencia, que se conciben con la idea de apoyar un determinado proceso de enseñanza - aprendizaje.
En los tipos segundo y tercero existe una "intencionalidad pedagógica" y, por lo tanto, un diseño específicamente orientado a la educación.
Una buena presentación interactiva debe tener:
Un guión lo más preparado posible con una buena estructuración de la información (diseño pedagógico) y una posibilidad de navegación clara que evite la desorientación (diseño estructural), además de estar dotada de una presentación atractiva (diseño estético).
Pistas para construir el diseño pedagógico
- Eligir el tema de una unidad didáctica.
- Definir los objetivos a conseguir.
- Buscar y seleccionar los contenidos que queremos incluir.
- Establece la metodología a seguir en el desarrollo de la unidad.
- Cómo va a ser la presentación - motivación - introducción.
- Investigación individual o en grupo.
- Estilo y cuantía de las intervenciones del profesor.
- Momentos para la intervención del grupo de clase o puestas en común.
- Momentos y tipo de evaluación.