El punto y la línea

Cuando estamos pensando en cómo mejorar nuestro centro educativo es muy útil conocer cómo está conformado su ecosistema en el momento actual. 

Para ello podemos realizar un mapa de actores para conocer cuales son las personas u organizaciones que, de una u otra forma, pertenecen a nuestro ecosistema. Ese podría ser el primer paso. 

El segundo podría ser dibujar ese ecosistema, visualizarlo, por medio de puntos y líneas. 

• Los puntos representan las personas u organizaciones que pertenecen al centro educativo o se relacionan con él.

• Las líneas representan las relaciones que se establecen entre ellas.

Representación de un ecosistema

Al trabajar con el modelo HIP nos apoyamos en estas visualizaciones para reflexionar sobre cómo son las relaciones que se establecen en nuestro ecosistema, nuestro centro educativo: si son relaciones unidireccionales o bidireccionales, fuertes (línea corta), débiles (línea larga), abiertas (con personas u organizaciones que están fuera de nuestra organización), por ejemplo, un ayuntamiento o una asociación. El modelo HIP propone que hagamos mejoras o cambios en nuestro centro para que nuestro ecosistema sea más potente, más abierto, más innovador.

Nuestro ecosistema puede cambiar al plantear nuevos proyectos, acciones, procesos o alianzas: 

 

• Podemos crear nuevos enlaces.

• Podemos detectar nuevos nodos fuera de nuestra organización.

• Podemos reducir las distancias entre los nodos, de forma que las líneas serán más cortas. 

• Pueden surgir nuevos nodos y nuevos enlaces que considerábamos improbables.

• Podemos hacer crecer nuestro ecosistema, detectando muchos nuevos nodos y creando enlaces.